"Amor hechos carne"



                                      "Amor hechos carne"

Nada más queda retirarse, despacio y sin hacer ruido.
Mezclarse con la gente es nocivo y nos demuestran que nada ni nadie se siente satisfecho de su vida. ¿Por qué?

Porque nadie vive el verdadero ser de su esencia.
Las primeras cosas que aprendemos es a renunciar, a todo lo que nos guste, a todo lo que nos ilusione y todo lo que nos permita sentir felicidad y alegría por hacer lo que nos agrade.

Foto de cottonbro en Pexels

Las palomas en los parques se han acostumbrado a recibir de manos de la gente las migajas y así mismo nosotros nos hemos negado el banquete y solo vemos las migajas de lo que somos o podemos ser.

Así nos adoctrinaron y así la sociedad a claudicado a los caprichos de unos seres egoístas que no conocen el amor ni lo conocerán en esta vida, porque se han creado un mundo hostil lleno de peligros y donde todos somos enemigos; aunque sonriamos mientras enterramos nuestra espada en la carne de otro igual.

La verdad que conocí es la de la mayoría y esa forma de vivir ya no me sirve, no me apetece seguirles, porque tuve la oportunidad un día de sentir algo...

Algo que nunca hube sentido. Somos energía y luz y vivimos apagando todos los resquicios por donde pueda salir y que te vean brillar.

A pesar de ello, y sin yo haber hecho nada para recibirlo, me vino sobre mí la luz del amor único, puro y verdadero.

Me envolvió y me cubrió de un amor que no conocía en este mundo. Porque este amor es la verdad y la raíz de todo, donde a quien toca lo trastoca por completo. Valga la redundancia, de esta manera recibí un baño de "Luz amor" Que me envolvió totalmente y no necesité preguntar, ni preguntarme nada porque no existen respuestas donde no existen las preguntas.

Está todo tan completo y tan lleno de vida. Solo puedes recibirla como la gran cura y la respuesta a todos los males del mundo; despiertas y ves que todos tus sueños he ilusiones que desde niño he tenido; tenían una razón, un fundamento de ser.

No hubo palabras, ni siquiera oí su voz únicamente me cubrió y lo sentí. Era "Él" por decir algo, ya que no tiene que ver con su género porque no lo tiene o mejor dicho los tiene todos, no trates de ponerle nombre porque no hay nombre para eso, únicamente se me ocurre decir "El amor" Vino a mí.

Pero ese momento mágico que apenas duró un par de minutos fue suficiente para comprender que menos mal que eso existe.

De no ser por esto creo que no estaría aún vivo, que todo lo vivido sea bueno o malo según mi punto de vista, ha valido la pena solamente por haber tenido esos momentos especiales; nadie recuerda a qué vinimos ni cuál es el sentido de existir aquí en esta tierra, porque es un designio divino y solo lo recordamos los primeros momentos a poco de nacer, pero luego pasa el tiempo y poco a poco vamos olvidando ¿Qué éramos? Y ¿Para qué vivimos?.

Puedo decir, sin miedo a quién sea, que el amor verdadero existe, que todos somos él y no una parte, somos completos. Somos amor total hechos carne. JP.


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