Cuando te veo no solo con mis ojos
Cuando te veo no solo con mis ojos Cuando te veo no solo con mis ojos, cuando te percibo no solo con mis oídos, cuando escucho tu voz y siento íntimamente que no es la verdad lo que dices, ni son tan amables tus verdaderos rostros y tu sonrisa expuesta; me duele como una daga punzante que se clava y remueve dentro mío; porque al seguir insistiendo con la mentira ofendes mi inteligencia y mi sentido común.