Tu mundo mi mundo

 

Tu mundo mi mundo

foto JP.

Palpitar el ritmo esencial de la vida es fundamental para comprender el mundo y tomar conciencia del universo circundante.

Nadie nos obliga a cambiar para el bien propio y ajeno, somos nosotros mismos quienes tomamos la decisión de hacerlo o no. Pero la verdad es imperioso hacerlo. ¿Por qué?…

En los actos cotidianos nos demostramos de qué somos capaces de hacer con nuestra individualidad y con la interacción con los demás.

No se trata de que demuestres que gran persona eres, porque la verdad es que todos nacimos de la misma forma, por lo tanto, ninguno es más importante que otro.

Si tomamos como referencia que cada uno es único e irrepetible, entonces todos deberíamos tener un planeta exclusivo para cada uno. Ya que esto no ocurre, deberíamos pensar que si bien todos somos únicos y vinimos al mundo con nuestros dones y capacidades también únicas. ¿Qué sentido tiene que nos matemos unos a otros para demostrar quién es mejor que el otro?.

No tiene lógica el intentar conseguir nuestros objetivos bajo cualquier medio, sea legal o no, lo hagamos consciente o inconscientemente, normalmente todos sabemos lo que es el bien y el mal.

No se trata de aparentar lo que no somos, sino que aceptar lo que somos capaces de hacer y lo que no nos gusta o no deseamos hacer.

Si a partir de ahora cada uno se detiene a pensar cinco minutos. ¿Cómo o cuál es el porqué que nos ha llevado hasta el presente a vivir en una sociedad tan desigual?

Nos daremos cuenta de que nadie tiene la razón ni la verdad, que tanto se pide y se reclama. Para que haya justicia social y cada uno pueda vivir una vida digna y en paz.

La solución es simple… Dedícate a lo que te gusta, haz el bien para ti y no pienses en hacer el mal para otro.

No importa si no deseas ayudar a los demás, lo que importa es no hacer daño a nada ni nadie.

Con ese simple acto ayudamos mucho no solo a nosotros mismos sino a todo el resto.

Si cada uno se responsabiliza de su propio accionar y toma consciencia de que nadie puede quitarte lo que por derecho vital te fue otorgado, entonces descubriremos que la sociedad cambiará a favor de la paz y de la justicia, sin necesidad de imposiciones de ningún tipo, simplemente tomando consciencia de nuestro poder único, simple y divino al mismo tiempo.

JP. 23 MARZO 2023