Tras la línea del Mundo               J.Perdriel                                                                                                                              Hace años trace una línea de un antes y un después .Nadie puede imaginarse lo que significa realmente pasar el límite del mundo conocido y físico, ni yo mísmo lo imaginaba. Una noche de invierno caminaba con mi familia por la calle de mi ciudad yo tenía apenas seis años de edad;miéntras venía distraído mirando las sombras que se anticipaban a nuestro grupo,ocurría cada vez que atravesabamos una esquina donde colgaba la faróla. De pronto algo hizo que alzára la vista y vimos una gran luz de color verde que se encendió de pronto en el cielo estrellado y en un instante comenzó a caer hacia la tierra; se perdió en el horizonte detras del caserío no sin antes iluminarlo todo con una explosión de verde luz.                                                                                      Mi padre intento explicar que eso podría ser un asteroide o meteoríto que aunque no tan común de verse,  que no temiéra nada.                                                                                                                                   Pero por alguna razón a pesar de mi corta edad,no me cerraba del todo la explicación que nos dió; luego de varios años, mis padres ya no vivían juntos y nos habíamos mudado con mi madre y dos hermanas a otra ciudad; a unos 500kilómetros de allí, ya era adolecente cuando en una sobre mesa mi padre de visita a nuestra casa,nos contó una historia curiosa e inquietante. En el tiempo que vivi solo en nuestra antigua casa, me ocurrió algo muy extraño que solo he comentado a muy pocas personas.                                                                                                                                        Una noche regresaba de un bar de madrugada, cuando al cruzar bajo la farola de la esquina sentí un desvanecimiento repentíno;no se como pero al abrir los ojos; me encontraba dentro de una especie de nave voladora; todo estaba en silencio y no me podía mover, estaba totalmente paralizado,no sentía miedo ni otro tipo de sentimientos,me sentía como sedado.Aunque no veía a mis espaldas pero sabía que había un ser a cada lado de mi asiento .                                                                                                                           Miéntras mirando al frente sin poder hacer otra cosa vi la figura de una especie de humanoide, su cabeza me pareció algo mas grande de lo común, aunque no había luces dentro de la nave su  media figura se recortaba frente al ventanal.En tanto que vi como sobrevolabamos por la avenida que atraviesa lateralmente la ciudad dirección norte sur; pasamos sobre el hospital y luego el estadio de fútbol, a una altura calcúlo que de entre treinta y cincuenta metros de altura; todo sin un solo sonido ni vibración ni nada que no fuera deslizarse sin esfuerzo por el aire.Sentí sobre mi cara un frío que me sobresaltó y de inmediato sentí en todo mi cuerpo mi propio peso y el frío y la oscuridad de la noche me espabiló al instante, me reíce y comencé a caminar sin saber donde estaba; miré mi reloj y apenas se habian movido las agujas, solo unos minutos desde que aparecí en esa nave,caminé hasta el poblado a unos quinientos metros hasta que ví un letrero que decia Puerto Ingeniero White.                                                                                                                        Estaba a mas de cincuenta kilómetros de mi casa, era imposible no era posible que hubiera recorrido esa distancia en tan poco tiempo, además que tenía en mi mente las imagenes de esa misteriosa nave.¿En que momento me alzaron o en que momento me dejaron ?, mi mente no encontraba lógica ,nada era lógico.                                                                                               Llegué hasta la estación de trenes,caminé por el andén desierto ,el reloj del muro marcaba las tres menos veinte de la madrugada,fui a la ventanilla a ver a que hora atendían, el cartel decía primer tren hacia Bahía Blanca 05.00 horas AM.                                                                                                                                                            Me acurruqué en una banca y me quedé dormido.Me desperté de un salto cuando la máquina del tren que se acercaba al anden,comenzó a pitar.Eran casi la hora de salida,me levante y fui a comprar mi billete.para regresar a la ciudad casi cuatro horas después del suceso.No me atreví a comentar nada de esto a nadie , ni siquiera a mis amigos.  Hacía  mucho frío ésa noche  y llevaba puesta mi chaqueta azul y encima un abrigo largo además de mi bufanda;pero al regresar de mi odisea a casa me quité el abrigo y la bufanda pero no llevaba puesta mi chaqueta.                                                                                                                      Estaba convencido de que la llevaba puesta y por mas que intentaba recordar en que momento me la había quitado, no recordaba haberlo hecho. Asi que me vi obligado a investigar en el bar donde había estado la noche anterior.Fui hasta el bar que quedaba a unos dos kilómetros de casa.Le pregunte si habia encontrado una chaqueta de color azul con un pequeño escudo bordado en el bolsillo derecho de arriba.                                                                                                                           El hombre me miró con un gesto de desconfianza, se quedó pensando y por fin dijo- Ha si ahora recuerdo algo de una chaqueta, pero no la he encontrado yo; es un cliente que vino por la mañana a tomar su café; y me dijo -Sabes Juan hoy temprano pasé frente al portón del aserradero y ¿Sabes lo que vi?-. -Ni idea le repondí.-Pues encima de la reja que tiene casi tres metros de alto colgaba una chaqueta azul;pensé ¿Que extraño no?.Llamé al cuidador del lugar y el también se extraño al ver la chaqueta colgada. -¿Y esto?.-Pués no lo sé lo llamé para que usted lo viéra.-¿No es suya? -No que va.Fue por un palo largo y la bajó; ambos la miraron pero no la reconociéron; buscaron en los bolsillos por si tenía alguna identificación o algo que les diera alguna pista, como no encontraron nada, el hombre del aserradero decidió guardarla por si alguien la reclamaba.Y casualmente ahora viene usted a preguntar por una chaqueta. Le dí las gracias y fuí hasta el aserradero.Le expliqué que buscaba mi chaqueta y que sabía que él había encontrado una colgada en el portón. Se sonrió al recordarlo. - Si he encontrado una chaqueta y la he guardado; pero disculpeme, ¿Puede describirla exactamente ¿Cómo es?Como comprenderá necesito asegurarme que realmente es usted el dueño. - Si por supuesto;luego de describírsela el hombre fue hasta su caseta y regreso con mi chaqueta en la mano.Le agradecí su gesto y díjo -¿Puedo hacerle una pregunta? Si dígame -¿Cómo es posible que usted haya colocado su chaqueta en este portón y a tres metros del suelo?- Buen hombre,eso es algo que yo mismo ignoro.- Me quedó mirando con desconfianza de si me burlaba de él o realmente no lo sabía.Y realmente hijos nunca lo súpe.-   

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