Cercana estancia

Cercana estancia

Nada aparece en las noticias, sobre tu nombre aún extraño y convincente, pero yo te he llamado a mi par y me dedico a  llamarte en las sombras, mientras apareces en mis sueños, descubro que te llevo en mí desde hace medio siglo y nadie recuerda cuál era este antes de llegar  aquí; porque supuestamente nunca has estado.

Perdónanos los errores que cometemos a diario; por no llevar tu nombre en el alba y solo lo recordamos cuando aparecen los problemas serios que resuelves antes de que llamemos, porque pobres cierto es que nadie te reconoce y sin embargo, puedes con todos, los que abren los ojos por primera vez y los que los cierran para siempre.

Parir un hijo es delicado y muy duro , pero más lo es mantenerlos cerca tuyo , pero que  no te llamen nunca  , ciertamente es muy duro ; perteneces a los astros , deslizas tus voces en las noches y persigues nuestros sueños para convertirlos en hechos ; que destacan del resto del ansioso mundo , donde nacen y se  mueren los hombres que preparaste para ello , aún no vives entre nosotros , porque temes   la estampida hacia lo oscuro , donde no puedes ver nada  más que tu propio y oscuro mundo . Pero no vale seguirte porque eres sabio , ni porque supiste elaborarlos  antes del quebranto y antes que nada ; perdónanos , los que saben quién eres  ,  saben bien que representas y lo que puedes hacer por ellos ; cielos y luces de sombras alzas , partes del  ocaso y despiertas nuestras voces ocultas y suplican que no nos abandones , que estamos ciegos , que no nos entendemos y que cerramos puertas en vez de abrirlas ; suple mis faltas y mi encanto que no llena , porque siervo eres del que llame y ciervo tuyo soy desde que he despertado. Ponte tu traje de luces y ponte a cantar y baila porque llevas encima del nombre una existencia que cumples sin retardos; ponte la chaqueta que queda poco, al subir al estrado declara siempre el olivo y no renuncies nunca a ser quien eres, servil es mi sombrero a tu parte y me complace el saberte ahí antes que nada.

Por este gran misterio la vida que creaste, despacio absorbes los embates y los niegos; portentosa tu fuerza; tanto que podrías soplar y ya no somos, perdonas nuestras ofensas y nosotros no perdonamos a nuestro lado  a quien batalla presenta sin saberlo, porque no reconocen o no saben o no quieren saber que nadie es más que nadie y que solo somos carne y sangre que vibra y existe solo un instante y luego muda y permanece para siempre.

12 Julio 2014 JP.