El juego de la vida

      El juego de la vida

La vida no es un juego, es tu actuación más excelsa; porque es importante tomarla en serio sea para algo duro o para algo de disfrute auténticos; reconoce que solo las cosas que das a los otros es llevada lejos como el viento y esparces sin saberlo las semillas que verán luego crecer nuestros hijos y mas tarde nuestros nietos.
JP.
Por eso digo no es un juego y es una gran responsabilidad dar las verdades y dejar que cada uno enfrente sus miedos; los hombres nacen sin saber nada de nada y van por ahí descubriendo cosas a su paso, aunque nunca es solo eso, siempre redunda en espacios grávidos y licuas el aire en que registras tus versos.
Versos que reforman o agravan los hechos; desistir es fácil y perseverar es lo suyo porque nadie entiende que pretenden la horas al marcarnos el tiempo; sustraen nuestra atención y nos desvían del lecho.
No es el caso pasearte por la senda mirando de soslayo a los que caen a tu lado y burlonamente sonriendo por sus errados ensayos; los que pecan solo son de ellos los temores y no es lo tuyo escandalizarte, pues quizás allí adelante te esperan mas que perros y sin querer te enredares y los veas más que bellos.
Por lo tanto cuida tu lengua y no los destruyas; puede que entre tantos hagas algún amigo, de esos que te llevan a la cima sin querer ser parte de ello; porque es tuyo el realce y son tuyos los dominios.
Caminos que no se hallen, deben ser alimento del ser nacido, que quedándose solo un rato descubrirá porqué a nacido y al encontrarse en las sombras descubrirá que era solo un corto pasillo; allí adelante las sombras desaparecen y se abren los caminos donde comienzan las horas que de verdad creías habías perdido.
Aquí no cuentan las obras ni los espacios vacíos; si lo que buscas y no encuentras es la verdad del hastío del que llama y no es oído, los poderes otorgados son de oro y no lo saben quienes de ellos han huido; aún así mientras tengas un respiro y no renuncies a tu destino , deja que pasten las cabras que para eso han nacido. Solo te pones en obra cuando apenas renacido descubres claros y sombras y de nadie te has asido. ¿Porque llevarte las costas de los que nacen perdidos, sin que ellos los reparen debes dejarles dormidos?
Tanta bondad humillada, tantas palabras de hastío, como llevarte a tu boca una palabra o gemido, si nadie conoce las formas que tiene el cielo pedido; para que guardes las cosas que tantos años as querido. Debes vaciar tus alforjas y quedar como has nacido.
Poderes simples y puros los que en ti siempre has tenido, aunque nadie reconoce, solo en la paz hay respiro, que guarda la voz de los hombres y de tus seres queridos.
Renuncia hoy mismo al estudiar tus sonidos y resbala por las formas de que el nadar te ha servido para flotar por las olas, pero recuerda que las playas son del que manda al mar que las olas , no sobrepasen el filo.
Pórtate como un hombre y se feliz en nadar pero no por pez ni por pescado, sino por ser por fin el que habla desde la paz y el destino que marca lo que tu eras, eres y serás por siempre un ser único capaz y bienvenido. JP

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