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                                                                        Cree

Al principio de recibir mi especial regalo quería compartirlo con todo el mundo; y así lo hice pero no tuvo la aceptación que esperaba. Entonces decidí ser más selectivo y elegí a personas que también habían recibido regalos parecidos, es decir algo extraordinario o mágico; pero con el tiempo comprendí que tampoco les interesaba saber que alguien más tenía un regalo especial que compartir. Parecía que en vez de alegrarse como inocentemente sentí yo, cada uno quería diferenciarse del mio.


Foto de Alizee Marchand en Pexels
Como si de una especie de competencia celestial se tratara… ¿…?


No lo entiendo… Aún hoy después de años de buscar una oportunidad de llegar a todo el mundo con los mensajes divinos; he hablado con editores, contactos con gente que está en la búsqueda de casos extraordinarios; de experimentar cosas verdaderas del espíritu, fanáticos de lo paranormal, ufólogos, resucitados de la muerte; analistas de los planos invisibles, espiritualistas y espiritistas, adivinos, psíquicos, gente que persigue fantasmas, escritores best sellers, conductores de programas de casos paranormales, místicos etc. etc.

Ahora comprendo porqué tantos profetas y santos han sido masacrados, castigados, o humillados en la sociedad a lo largo las distintas épocas de la historia. No creen, en realidad no quieren creer y siempre buscan el pelo en la sopa o como Tomás el discípulo de Jesús (La incredulidad de Tomás es el episodio del Evangelio de Juan donde el apóstol Tomás niega la Resurrección de Cristo, mientras no vea y toque personalmente las heridas infligidas a Jesús en la Cruz.)

Gracias a que sé que existe una ley no escrita ni humana, que pone las cosas en su sitio. Pobre Jesús cuanto sufrimiento además de ser crucificado habrá tenido que soportar mientras vivía entre los hombres.

Soy un simple mensajero y mi tarea es la de compartir mensajes, reflexiones y pensamientos que recibo a diario, no soy un santo, ni un profeta; pero mis palabras son verdaderas y mi único deseo es que la humanidad comprenda por fin que no es así la vida como la vivimos ni son los caminos los correctos para hallar la paz tan buscada.

Tenemos las respuestas ante nuestros ojos y seguimos buscando pruebas, visitando cementerios, casas abandonadas, cloacas; consultando brujos, tiradores de cartas, hechiceros. Invertimos miles de millones en crear artefactos solo para poder oír señales inteligentes que vengan del espacio, y ¿Cuando vemos naves surcar los cielos? Decimos que son satélites o aviones o drones.

Claro que existen no una sino millones de civilizaciones inteligentes, solo que ellos nos llevan millones de años de ventaja; por eso es imposible intentar manipularlos o creernos mas listos que ellos; incluso… Y esto me da la risa(…) Que algunos vienen a conquistarnos y quedarse con el planeta, en fin mucho se ha escrito, hablado y tergiversado tanto que ya no sabemos distinguir cuando una noticia es verdad o mentira.

No hace falta convencerlos de nada, lo único que pido es que cada uno, cada ser humano intente al menos conectarse con su ser verdadero, pero solo con la entrega verdadera de nuestra alma; sé que estamos cansados y desilusionados con el mundo; porque muy pocos logran momentos de felicidad y paz verdaderas. La mayoría trabaja en lo que no le gusta, u ocupa un lugar en la sociedad porque de algo hay que vivir…

Cuando en realidad somos como tantas veces lo he dicho. Nosotros lo humanos somos el milagro más grande del mundo, y las respuestas a una vida plena están dentro de cada uno. No busquéis más fuera, solo conseguirás desilusión, agotamiento y pena. Encuentra contigo mismo la verdad que eres, siente tus latidos, piensa en todo lo que puedes hacer de bien para ti y para el mundo. No mientas, no te mientas, no engañes, no robes, no maltrates a nadie comenzando por ti mismo; deja de lastimarte y herir a quienes te aman.

Hombre siéntate a meditar solo cinco minutos cada día y por favor comienza a cambiar y verás como cambia tu vida y la del resto. JP.

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